Antecedentes
En junio de 1949, Minerva y sus padres fueron invitados por las autoridades de Santiago a una fiesta en el Palacio de la Gobernación, en honor a Rafael Leónidas Trujillo, que desde 1930 ejercía una de las más crueles dictaduras de América Latina. El tirano se sintió desde el primer momento atraído por la belleza de la joven de 23 años.
A mediados de agosto de 1949, la familia Mirabal recibió una nueva invitación, esta vez fue la inauguración del Hotel Montaña en Jarabacoa. La demostración de galantería hacia Minerva incomodó a la apuesta joven y se negó a continuar bailando.
12 de octubre de 1949, la familia Mirabal recibe la tercera invitación. Una fiesta en Villa Borinquen, lugar de descanso del tirano. La primera reacción de la madre Maria Mercedes Camilo, fue objetar que Minerva asistiera. Luego de analizar las implicaciones políticas que esto podría tener, decidieron que lo mejor era asistir.
Durante el desarrollo del baile, Trujillo intentó seducir a Minerva. Ella, no sólo lo rechazó, sino que en su cara le dijo que “dejara tranquilo a ese joven tan inteligente y preparado llamado Pericles Franco”. Era un conocido dirigente comunista, fundador del Partido Socialista Popular y muy amigo de Minerva. Las palabras de la joven molestaron profundamente al tirano.
Cuando los padres se enteran de lo sucedido, optan por irse de la fiesta sin avisar. A los pocos días, el padre Enrique Mirabal fue detenido y encarcelado. Lo mismo ocurre con Minerva y algunos amigos. Se les preguntó sobre la relación de Minerva con el Partido Socialista Popular, y en especial con el líder comunista Pericles Franco.
Pasaron varias semanas en la cárcel. Tras su liberación, la tiranía llevó a cabo una tenaz operación de espionaje contra la familia Mirabal. El padre murió el 14 de diciembre de 1953.
El 20 de noviembre de 1955, Minerva se casó con Manuel Aurelio Tavárez Justo, compañero combatiente contra la tiranía Trujillista. En agosto de 1960, las tres hermanas fueron puestas en libertad, mientras sus maridos seguían encarcelados en la prisión de San Felipe de Puerto Plata.
Los últimos años de la década del cincuenta estuvieron marcados por el descontento social en toda América Latina y nuestro país no fue ajeno a esta realidad. La caída de varios dictadores y la victoria de Fidel Castro en Cuba despertaron esperanzas de cambios profundos en todo el continente.
Reacciones de Las Hermanas Mirabal y compañeros
El 1 de enero de 1959 triunfó la Revolución Cubana. Este hecho histórico influyó en los sectores más importantes de los países latinoamericanos e incidió en nuestro país.
Tanto Manolo como Minerva, cuando se comprometieron, tenían ideales patrióticos y democráticos bien definidos. Manolo pertenecía a la Juventud Democrática, pero nunca había manifestado públicamente su rechazo a la tiranía, como lo había hecho Minerva desde 1947 en todas sus conversaciones con familiares y amigos. La actitud de Manolo también era de firme oposición a la tiranía. En una ocasión en que el exsenador de la República, Manuel de Jesús Estrada Medina, le quiso pagar dos cheques por el trabajo que había realizado como juez de paz o fiscalizador; Manolo los rompió, los lanzó al agua y le dijo: «Gallo, no los quiero».
Durante una reunión familiar celebrada el 6 de enero de 1959 en la residencia de Manuel Aurelio Tavares Justo (Manolo), se analizó la situación política que se había desarrollado en el Caribe, especialmente en Cuba tras la victoria de Castro unos días antes. En la citada reunión estaban Minerva, Manolo, María Teresa, Leandro Guzmán y otras personas. En esta reunión, Minerva reveló por primera vez la posibilidad de organizar un movimiento clandestino para derrocar a Trujillo. La idea de Minerva llamó la atención de todos los participantes, y acordaron ese día establecer contacto con amigos y familiares de todo el país.
El 10 de enero de 1960 se realizó una reunión en la casa de Patria Mercedes, en Conuco, Salcedo (hoy provincia Hermanas Mirabal), para facilitar la identificación de los miembros. En este encuentro estuvieron presentes las tres hermanas: Minerva, María Teresa y Patria, y los más destacados miembros de la organización.
En una reunión familiar, ocurrida en enero de 1959, en la residencia de Guido D’Alessandro, sobrino de Manolo Tavárez, Minerva planteó la posibilidad de organizar un movimiento para derrocar la tiranía. La idea fue acogida con entusiasmo por todos los presentes y comenzó el reclutamiento de miembros. Minerva, cuyo nombre era Mariposa, trabajó de manera clandestina. El 14 de junio de 1959 desembarcan desde Cuba expedición armada. Fue aplastada, pero el heroísmo de los que cayeron en el esfuerzo impresionó fuertemente a la juventud dominicana.
En reconocimiento a esta gesta, el 10 de enero de 1960, en la hacienda de Conrado Bogaert, en ciudad de Mao, se constituyó la Agrupación clandestina “14 de junio”. A ese histórico evento sólo dos mujeres participaron. Una de ellas fue Minerva, quien fue propuesta para presidir el movimiento, ella propuso a su compañero Manolo Tavárez, lo que fue acordado por unanimidad. Su objetivo era derrocar la dictadura de Trujillo.
Asesinato de Las Mariposas
Los nombres de los sicarios imputados por homicidio son: Alfonso Cruz Valerio, Emilio Estada Malleta, Néstor Antonio Pérez Terrero, Ramón Emilio Rojas Lora, bajo la supervisión de Ciriaco de la Rosa, a solicitud de: Candito Torres Tejada, Johnny Abbes García, Jefe del Servicio de Inteligencia Militar, con la aprobación del General Pupo Román, comandante de las Fuerzas Armadas, a las órdenes de Rafael Leónidas Trujillo en su despacho del Palacio Nacional a Abbes García, con una orden directa: “El problema de las Mirabal hay que liquidarlo».
En una de las visitas que ‘Las Mariposas’ hicieron a la cárcel, alertaron a sus parejas de los rumores que existían acerca de la posibilidad de que las hermanas sufrieran un «accidente»: en realidad hacían referencia a la manera en la que el régimen de Trujillo hacía desaparecer a sus opositores.
El 25 de noviembre de 1960 su cuerpo fue encontrado destrozado en el fondo de un barranco dentro de un jeep con sus hermanas Patria y María Teresa y el chofer Rufino de la Cruz.
Uno de los esposos sugirió que suspendieran las visitas a la prisión y que de vuelta a la ciudad trataran de evitar las carreteras. Pero tras culminar aquella visita, el 25 de noviembre, ya era tarde: fueron interceptadas en la carretera e introducidas a la fuerza en un vehículo. Patria huyó en dirección a un camión del Seguro Social que se aproximaba, pero la golpearon, la jalaron del cabello y la subieron al auto con sus hermanas, pero antes alcanzó a gritar a los del camión: “Díganle a la familia Mirabal, de Salcedo, que los caliés van a matarnos”.
Los “caliés” a los que Patria hacía referencia eran miembros del servicio de Inteligencia militar de Trujillo, su policía secreta.
Ciriaco de la Rosa confeso asesino de “Las Mariposas”, relata lo siguiente: “Después de atraparlas, las llevamos cerca del abismo, donde Rojas Lora ordena que traiga unos palos y se lleve unas de las muchachas. Inmediatamente obedece órdenes y se lleva a una de ellas, con largas trenzas (María Teresa); Alfonso Cruz Valerio eligió a la más alta (Minerva), yo elegí a la más poderosa (Patria) y Malleta, al chofer Rufino de la Cruz”.
Rufino De la Cruz, un agricultor y transportista de carga que había manifestado públicamente sus ideales democráticos, había recibido, según testimonios recogidos por su biógrafo, la misión secreta de acompañar a una de las hermanas, a «La Mariposa» (Minerva).
El confeso asesino continúa diciendo: «Ordené a cada uno que se internara en un cañaveral a orillas de la carretera, separadas todas para que las víctimas no presenciaran la ejecución de cada una de ellas», y así fue. Las hermanas fueron matadas a golpes, el chófer ahorcado y sus cadáveres, colocados en el ‘jeep’ a Rufino De la Cruz y arrojados por un precipicio.» En la imagen se puede vemos a Manolo Tavárez Justos y Leandro Gúzman, observan en lugar donde fueron asesinadas las Mirabal y Rufino de la Cruz.
Este funesto acontecimiento, fue la gota que rebozó la paciencia del pueblo dominicano, sirvió para que un grupo de hombre valientes dieran fin a una de las dictaduras más sangrientas de la historia. El 30 de mayo de 1961, fue ajusticiado el dictador Rafal Leónidas Trujillo Molina.
Fuentes: https://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-42060899 https://elsiglo.cl/2020/11/26/historia-a-60-anos-del-asesinato-de-las-hermanas-mirabal/ https://acento.com.do/actualidad/asi-asesinaron-a-las-hermanas-mirabal-y-a-rufino-de-la-cruz-8887408.html
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