En las escuelas utilizan las pruebas con dos objetivos principales. Uno es averiguar cuánto aprende un estudiante individual en la clase. Por ejemplo, los maestros pueden evaluar qué tan bien responde un estudiante a las instrucciones de lectura usando evaluaciones que miden las destrezas específicas necesarias para la lectura fluida.
El otro fin es averiguar qué nivel de cumplimiento alcanza la escuela con respecto a los estándares locales y nacionales de progreso estudiantil. Con este fin las escuelas usan las pruebas estandarizadas, que generalmente se toman en la primavera.
Cómo padre, hay muchas maneras en que puedes apoyar al éxito académico de tus hijos/as durante el año escolar, éste apoyo le ayuda también a tener mejores resultados en los exámenes.
Durante el año escolar
Habla con tus hijos/as sobre las tareas, las calificaciones y los exámenes al inicio del año escolar.
Es útil que los hijos sepan por qué las escuelas dan exámenes y conozcan los diferentes tipos de exámenes que tendrán que tomar. La mayoría de los exámenes son diseñados y administrados por los maestros para evaluar si los estudiantes están aprendiendo información importante. Estos exámenes van relacionados con las calificaciones y los informes de progreso.
Los resultados indican al maestro y a cada alumno si va al mismo paso que el resto de la clase, si necesita ayuda adicional o si va más adelantado que los otros alumnos.
Asegúrate que asista regularmente a clase
Los exámenes reflejan el rendimiento general del estudiante. Entre más esfuerzo y energía su hijo le dedique a su aprendizaje, mayor será la probabilidad de que tenga resultados positivos en los exámenes.
Reúnase con el profesor para dialogar sobre su progreso. Pídale que le sugiera actividades para realizar con tus hijos/as en casa que le ayuden a prepararse para los exámenes y para que comprenda mejor su quehacer escolar.
Si cree que las dificultades de tu hijo/a con las pruebas estandarizadas pueden ser el síntoma de un problema como dificultades lingüísticas o del aprendizaje, hable con el profesor para saber si su hijo reúne los requisitos para arreglos especiales de evaluación.
Provea un lugar callado y cómodo para estudiar en casa
Asegúrate que tu hijo/a realice las tareas diarias. Motívelo a comprender la importancia de la educación para su desempeño en el resto de su vida y que hay que cumplir con la tarea escolar.
Puedes ayudar a tu hijo/a con la tarea de las siguientes maneras:
- Selecciona un lugar especial para que su hijo estudie.
- Fíjale una hora para hacer la tarea.
- Elimine las distracciones cómo el televisor, llamadas, el Internet específicamente las redes sociales.
Asegúrese de que su hijo descanse bien y tenga una dieta equilibrada
Para tus hijos/as las horas de sueño son de vital importancia cuando llega el tiempo de examen. Por tanto, los beneficios de una buena noche de sueño debe ser considerado.
Los/as hijos/as cansados tienen mayores dificultades para enfocarse en su trabajo en la escuela o para superar las exigencias de un examen.
Anime a su hijo
Elógielo por las cosas que puede hacer bien. Si su hijo/a se siente bien sobre sí mismo, podrá dar su mejor esfuerzo. Sí les atemoriza el fracaso es más probable que se sientan ansiosos al tomar un examen y que cometan más errores.
Ayude a su hijo a evitar la ansiedad por causa de los exámenes
Cuando los padres, pese a las buenas intenciones, prestan demasiada atención a los resultados de las pruebas, les ponen presión innecesaria a los hijos pequeños. Para los hijos con problemas de atención o dificultad para memorizar, las pruebas pueden resultar muy estresantes porque les exige usar estas destrezas en particular, y causar ansiedad de examen.
«Ansiedad de examen» significa preocuparse demasiado sobre cómo va a salir en el examen. Los alumnos con este tipo de desorden se pueden preocupar de más sobre su éxito en la escuela y en la vida. Pueden criticarse a sí mismos de más y perder la seguridad en sí mismos y en sus habilidades.
Muchos estudiantes en este período pre-exámenes en vez de sentirse desafiados por la promesa del éxito a lograr, pueden volverse temerosos del fracaso. Si su hijo/a se preocupa demasiado al tomar exámenes, usted le puede ayudar a minimizar la ansiedad al darle los siguientes consejos:
Sírvale de apoyo
Como padre, la mejor manera de ayudar a tu hijo/a para que le vaya bien en las pruebas es leerle con frecuencia, conversar sobre sus experiencias y brindarle un lugar de estudio tranquilo y acogedor en la casa.
Planifica de antemano
Asegúrese que su hijo/a comienza a estudiar mucho antes del examen, y que comprende bien el material que cubrirá el examen. Dígale a su hijo/a que no trate de estudiar todo la noche anterior.
Esto solo le hará sentirte más ansioso, lo que puede interferir con su razonamiento. Es mejor descansar bien la noche anterior.
Indíquele que hacer durante el examen
Como padre debes orientarlo en algunos aspectos como son:
- Leer las instrucciones con mucho cuidado antes de comenzar tu trabajo.
- Si hay algo que no entiendes, pídele al maestro que te lo explique. Es su mejor asesor durante el examen.
- Revisa el examen cuidadosamente para ver qué tipos de preguntas incluye. Esto te ayudará a determinar cuánto tiempo debes tardar en cada sección.
- Si no sabes una respuesta, déjala y sigue con el examen.
- No desperdicies tiempo preocupándote demasiado con una sola pregunta. Márcala y si tienes tiempo al final del examen, regresa e intenta responder de nuevo.
No se moleste demasiado por los resultados de un solo examen
Una vez te enteras cuál fue el resultado de determinado examen, no debes presionarlo si le fue mal, ya que en estas situaciones pueden influir muchas cosas. Estas son algunas razones:
- Quizás se sentía mal ese día o los nervios afectaron su concentración.
- Quizás tuvo una discusión con un amigo antes del examen o llegó tarde a la escuela porque se congestionó el tráfico.
Es importante tener pendiente que un solo examen es nada más y nada menos que un solo examen.
Después del examen
Si sienten duda sobre el resultado de un examen pueden pedirle a profesor una revisión. Tu hijo/a puede aprender mucho al revisar un examen ya calificado. Al revisarlo podrá ver en qué áreas tuvo mayores dificultades y quizás por qué. Esto es especialmente importante en las clases en las que el material va profundizándose de una sección a la que sigue, como en las matemáticas. Tome estos pasos cuando su hijo recibe su examen.
- Al momento de revisarlo pídale al profesor una explicación sobre las “respuestas erróneas”, así tu hijo descubra por qué respondió de esa manera.
- A veces no entiende o lee mal las preguntas. O quizás sí se sabía la respuesta pero no supo cómo darla claramente.
- Es bueno conversan con tu hijo sobre los comentarios que el maestro apunte en un examen calificado.
- Si algún comentario no está claro, dile a tu hijo/a que le pida al maestro que se lo explique.
- Por último, recuerde que las pruebas estandarizadas y los sistemas de calificación no son perfectos.
Cada formato tiene sus propias limitaciones. Cuando ayude a su hijo a esforzarse al máximo para las pruebas que debe dar y en la tarea para el hogar, también recuérdele que las pruebas son una parte más de su educación. Con su apoyo y participación, ¡estará bien encaminado hacia un futuro brillante!
Fuente: http://www.colorincolorado.org/
Adaptado para Educando.
Recursos Relacionados:
Realmente es muy instructivo. Ya donde trabajo como maestra le explicamos a los padres muchas de sus sugerencias y luego del examen se hace una revision general con los alumnos\as sobre las respuestas del examen . Es muy didactico y edificante para el joven o niño autoevaluarse y mejorar.